Nuestros héroes

Nuestros héroes

 

Hay cosas que, aunque sean un poquito clichés, están muy arraigadas a la cultura mexicana, aunque quisiéramos, no podríamos imaginar un México sin tacos, sin el mariachi, el día de muertos y, por supuesto, la lucha libre

Probablemente, el deporte que, si bien no nació en México, fuimos nosotros los que lo llevamos a niveles globales y es extraño no ver una máscara de El Santo o Blue Demon en algún festival, o evento deportivo de cualquier tipo. Poniendo entre nosotros a héroes y villanos de carne y hueso, de quienes sentimos su dolor, sus derrotas, sus triunfos y expresamos las más sinceras mentadas de madre hacia el villano.

Y es que la lucha libre, ha dado las más míticas leyendas urbanas a nuestra cultura. Como aquella que decía que El Santo tenía superpoderes, o su máscara estaba pegada a su cara, o que si alguna vez se la quitaba perdería la vida, curiosamente, diez días antes de que falleciera, descubrió su cara por dos segundos en una entrevista en televisión, lo demás, es leyenda pura.

El luchador, como un ente que va más allá de nuestro entendimiento carga con las alegrías y las penurias de quienes lo observan y lo idolatran. A diferencia de cualquier otro deportista, el luchador, para el aficionado, es parte de él completamente, es alcanzable, como una especie de justiciero que trasciende la barrera de lo místico y se entrega a sus seguidores, volviéndose con ellos una masa que empuja al mismo lado.

El Cineclub B.22, nos lo recuerda, trayéndonos el ciclo de cine "De dos a tres caídas", en el que recordamos aquella época dorada del cine de luchadores, con cintas que son consideradas de culto para el género como "El Santo contra las Mujeres Vampiro" o "Blue Demon contra las Arañas infernales". Dándonos la oportunidad de revivir, todos los jueves de este mes, las glorias de aquellos que se convirtieron en leyendas del deporte de los costalazos, y referentes directos a la cultura nacional.

 

ivan@adncultura.org