Las 100 mejores películas rusas y soviéticas II

 Las 100 mejores películas rusas y soviéticas II

Por Alexandra Gúzeva

Mientras que la literatura y la música suelen portar la antorcha cultural de Rusia por todo el mundo, la producción cinematográfica del país no tiene nada que envidiarles. Te invitamos hoy a descubrir este "ranking" de los mayores éxitos fílmicos del país eslavo.

50. ‘Cuidado con el coche’, de Eldar Riazánov (1966)

Eldar Riazánov/Mosfilm, 1966

Yuri Détochkin es un Robin Hood soviético. Roba autos a los ricos, los vende y da el dinero obtenido a los orfanatos. Un investigador descubre los crímenes, pero al enterarse de los nobles objetivos de Détochkin se muestra incapaz de arrestar al ladrón. Una de las películas soviéticas más populares, pretendía representar al ciudadano soviético ideal, para quien la conciencia y la igualdad social son primordiales.

49. ‘En casa entre extraños’, de Nikita Mijalkov (1974) 

Nikita Mijalkov/Mosfilm, 1980

Un western soviético sobre el final de la guerra civil rusa. Un grupo de exsoldados del Ejército Rojo, ahora chekistas (oficiales de seguridad del Estado), se encargan de transportar un cargamento de oro confiscado a la burguesía a Moscú, pero son asaltados primero por la Guardia Blanca y luego por bandidos... El debut como director de Nikita Mijalkov es considerado un clásico del cine. Se presentó en varios festivales internacionales.

48. ‘Verano’, de Kirill Serébrennikov (2018)

Kiril Serébrennikov/Hype Film, 2018

Es una película biográfica del rockero de culto Víktor Tsoi, que retrata la cultura underground soviética. La cinta ganó un premio de Cannes a la mejor banda sonora. El drama plasmado en la pantalla fue igualado por el drama del propio rodaje de la película: el director Kirill Serébrennikov la terminó mientras estaba bajo arresto domiciliario, bajo cargos de malversación de fondos.  

47. ‘Increíbles aventuras de unos italianos en Rusia’, de Eldar Riazánov y Franco Prosperi (1974)

Eldar Riazánov, Franco Prosperi/Mosfilm, 1974

Se da el caso de que San Petersburgo es hogar de un gran número de estatuas de leones. Para encontrar al que tiene un tesoro enterrado debajo, unos ladrones italianos deberán cavar debajo de todos ellos. La culpa de todo es de un anciano emigrante ruso que escondió un tesoro bajo un león durante la revolución. La película presenta muchos efectos especiales que no desmerecían a los de Hollywood por aquel entonces, incluyendo una explosión en una gasolinera y una persecución en coche. Sin dobles, los propios actores saltaron un puente móvil en San Petersburgo y bajaron, usando sábanas anudadas, por la ventana de un edificio de varios pisos.

46. ‘Dos camaradas en el Ejército’, de Evgueni Karélov (1968) 

Evgueni Karélov/Mosfilm, 1968

Es una de las mejores películas sobre la guerra civil rusa, incluso los profesores de historia aconsejan verla. En ella, un destacamento de la Guardia Blanca es rodeado, en Crimea, por el Ejército Rojo. Un comandante de este último instruye a dos soldados a filmar desde el aire la ubicación de los blancos con una cámara de cine (una hazaña tecnológica difícil en la época de la guerra civil), pero su avión acaba estrellándose y son capturados...

45. ‘Viy’, de Konstantín Ershov y Gueorgui Kropachiov (1967) 

Konstantín Ershov y Gueorgui Kropachiov/Mosfilm, 1967

Las películas de terror soviéticas se pueden contar con los dedos de una mano. Pero viendo Viy, te arriesgas a volverte de color gris, como hace uno de sus personajes al final de la película. Se basa en la historia de Nikolái Gógol en la que un estudiante de seminario es enviado de noches a rezar sobre el cuerpo de una bella chica fallecida. ¡Alerta de spoiler! La chica resulta ser una bruja, y se levanta de la tumba en la primera noche.

44. ‘Cuando pasan las cigüeñas’, de Mijaíl Kalatózov (director) y Serguéi Urusevski (director de fotografía) (1957)

Dos tortolitos pasean por Moscú hasta altas horas de la noche, pero por la mañana descubren que la Unión Soviética está en guerra. El joven es llamado al servicio de primera línea, mientras su novia permanece en Moscú y termina casándose con otro hombre. La película no es recomendable para las personas sensibleras. Los miembros del jurado de Cannes en 1958 lloraron tanto que le concedieron el máximo galardón del festival, la Palma de Oro.

43. ‘El Don apacible’, de Serguéi Guerásimov (1958)

Serguéi Guerásimov/Estudio de cine Gorki, 1958

Si no has leído la epopeya en cuatro volúmenes de Mijaíl Shólojov sobre la guerra civil rusa, descrita como “Guerra y paz del siglo XX”, entonces definitivamente necesitas ver esta adaptación a la gran pantalla de la novela ganadora del Premio Nobel. La Revolución de Octubre pone patas arriba las vidas de millones de personas. Los hermanos se levantan en armas unos contra otros, mientras que el protagonista está dividido entre el lado blanco y el rojo, entre su esposa y su amante. En esta película hay de todo: amor, traición, muerte. ¡Cosas apasionantes!

42. ‘Miminó’, de Gueorgui Danelia (1978) 

Gueorgui Danelia/Mosfilm, 1978

Un georgiano apodado Miminó trabaja como piloto de una aerolínea local, pero sueña con volar alrededor del mundo y, al mismo tiempo, conquistar el corazón de una hermosa azafata del mundo de la “gran aviación”. Habiendo cumplido su sueño, comienza a anhelar su patria...

El encanto y el sabor de la Georgia soviética conquistaron a toda la URSS con impresionantes paisajes, héroes locales y la canción Chito Gvrito Cheto Margalito, que aún se canta hoy en día.

41. ‘Sin amor’, de Andréi Zviáguintsev (2017)

La propuesta más reciente de Zviáguintsev ganó, entre otros, el Premio del Jurado en Cannes y los de Mejor Película, Mejor Banda Sonora y Mejor Director de Fotografía en los Premios del Cine Europeo, además de ser nominada para un Óscar y un Globo de Oro. La historia trata de dos padres, separados en una relación sin amor, que provocan la huida de su hijo.

40. ‘Octubre’, de Serguéi Eisenstein (1927)

El asalto del Palacio de Invierno por parte de los marineros rodado para esta película es a menudo confundido con imágenes históricas reales. Ligeramente embelleciendo la realidad, Eisenstein muestra el derrocamiento del poder zarista y el establecimiento del dominio bolchevique. Se trata de una oda cinematográfica a la Revolución de Octubre, que el año pasado fue lo primero que se pensó en proyectar con motivo del centenario que esta cumplía. 

39. ‘Las aventuras del Electrónico’ (miniserie), de Konstantín Bromberg (1980)

Konstantín Bromberg/Estudio de cine de Odessa, 1980

Todos los niños sueñan con tener un gemelo que pueda hacer los exámenes por ellos. Eso es lo que le pasa al chico Seriozha Siroiezhkin, sólo que su doble es un robot altamente inteligente llamado Electrónico. Pero al encontrarse en el mundo de las personas, Electrónico se siente incómodo, pues él mismo no es humano. Una de las películas infantiles más populares, también produjo algunas canciones maravillosas, una de ellas, Columpios con alas, se convirtió en un icono.

38. ‘El país de los sordos’, de Valeri Todorovski (1998) 

Valeri Todorovski/Estudio de cine Gorki, 1998

El novio de Rita debe dinero a unos delincuentes y desaparece, dejándola como garantía. Es rescatada y protegida por una stripper sorda, que quiere ir lejos, muy lejos, al “país de los sordos”, su propia tierra prometida privada... Fue una de las primeras (y todavía pocas) películas en Rusia en abordar el tema de la discapacidad, y conquistó el corazón del público gracias al magnífico dúo interpretativo formado por Dina Korzun y Chulpán Jamátova.

37. ‘La más encantadora y atractiva’, de Gerald Bezhánov (1985)

Gerald Bezhánov/Mosfilm, 1985

La ingeniera Nadia tiene más de 30 años y está preocupada porque aún no se ha casado. Susana, una amiga de la escuela, decide ayudarla consiguiendo algunos trajes de moda en el mercado negro y enseñándole los métodos de la “seducción científica”. Pero lo principal es la autoformación, que consiste en repetir el mantra: “Yo soy la más encantadora y atractiva”. Compruebe por ti mismo en que acaba todo esto en una de las comedias más populares de la era de la perestroika.

36. ‘Los amaneceres son aquí más apacibles’, de Stanislav Rostotski 1972 

Stanislav Rostotski/Estudio de cine Gorki, 1972

Otra conmovedora película sobre la Segunda Guerra Mundial, basada en una obra de Borís Vasíliev. Es la historia de cinco mujeres jóvenes con destinos muy diferentes, todas ellas unidas por la guerra. Bajo el liderazgo de su comandante, arriesgan su vida para dar caza a los invasores fascistas en bosques y pantanos.

35. ‘Sol blanco del desierto’, de Vladímir Motil (1970)

Vladímir Motil/Mosfilm, 1970

A orillas del mar Caspio, la guerra civil rusa acaba de terminar y el soldado del Ejército Rojo Sújov se dirige, a pie a través del desierto, para reunirse con su amada esposa. Pero un día se tropieza con un hombre que ha sido enterrado hasta el cuello en la arena por bandidos. Decide salvarlo, junto con las mujeres del harén de otro criminal. Este primer western soviético es famoso por algunas grandes actuaciones y diálogos. De hecho, muchas de las citas de la película se han convertido en refranes rusos.

34. ‘Caballeros de fortuna’, de Alexánder Seri (1971) 

Alexánder Seri/Mosfilm, 1971

Un maestro de guardería es la viva imagen de un peligroso delincuente, por lo que la policía le pide ayuda para investigar el robo del casco de oro de Alejandro Magno. Pero para ello, el tranquilo tutor debe infiltrarse en una banda criminal e incluso organizar una fuga. La brillante actuación de sus intérpretes, junto a una trama que pone la carne de gallina, la convirtieron en un éxito de taquilla.

33. ‘Yo paseo por Moscú’, de Gueorgui Danelia (1964) 

Gueorgui Danelia/Mosfilm, 1964

La canción homónima se ha vuelto casi más popular que la película, y es una de las más frecuentemente interpretadas en Rusia en la actualidad. La imagen nació de una escena creada por el guionista del film: una chica camina a través de la hermosa lluvia de Moscú, mientras que un chico anda en bicicleta a su lado. Los temas principales son el “deshielo de Jrushchov” y la construcción de edificios altos y esperanzas aún mayores. También fue el debut en el mundo de la interpretación del futuro director Nikita Mijalkov, ganador de un Óscar.

32. ‘El garage’, de Eldar Riazánov (1979)

Eldar Riazánov/Mosfilm, 1979

Una sociedad de propietarios de garajes se reúne para discutir un tema candente: algunos miembros tendrán que perder sus garajes debido a la construcción de una nueva carretera. En medio del debate, descubren que alguien ha cerrado la puerta de la habitación y ha escondido la llave: todos tendrán que pasar la noche entera bajo el mismo techo. Filmada en sólo 24 días, la conmovedora comedia de Eldar Riazánov, basada en una reunión real al que una vez asistió, se ha convertido en un verdadero clásico.

31. ‘Cargo 200’ de Alexéi Balabánov (2007) 

Alexéi Balabánov/CTB, 2007

El capitán de policía Zhúrov viola a una chica y la esposa a una cama. Deja allí a la trastornada madre alcohólica de la cautiva para que la cuide. Mientras tanto, los ataúdes de zinc con los cuerpos de los soldados soviéticos muertos en Afganistán son enviados de vuelta a casa, pero no hay nadie que los entierre... La cinta, proyectada en el Festival de Venecia, está llena de violencia y cadáveres, siendo los hechos mostrados verdaderamente impactantes, pues están basados en unos reales. Muchos actores se negaron a participar en la película, y algunos cines se negaron a exhibirla.  

30. ‘El lugar de encuentro no puede ser cambiado’ (miniserie), de Stanislav Govorújin (1979)

Stanislav Govorújin/Estudio de cine de Odessa, 1979

Se dice que el índice de criminalidad en la URSS descendía durante las horas en que esta serie era transmitida por televisión. Todo el país, incluidos los delincuentes, estaba pegado a la pantalla mientras los investigadores Gleb Zheglov (interpretado por Vladímir Visotski) y Vladímir Sharápov perseguían a una banda de delincuentes en la Unión Soviética de posguerra. Eran los Holmes y Watson de su época, incluso el bigote de Sharápov era como el de Watson.  

29. ‘Una estación para dos’, de Eldar Riazánov (1982)

Eldar Riazánov/Mosfilm, 1982

La famosa actriz Liudmila Gúrchenko interpreta a una camarera maleducada de un café ubicado en una estación de tren. Su único interés romántico es un chantajista con el que se encuentra fugazmente en un compartimento de tren cada vez que este pasa por allí. Pero un día un hombre nuevo e interesante aparece en su vida cuando queda atrapado en la estación (en gran parte por culpa de ella). La película compitió en numerosos festivales europeos y tuvo una gran acogida en Cannes.

28. ‘Al combate sólo van los veteranos’, de Leonid Bíkov (1974) 

Leonid Bíkov/Mosfilm, 1974

¿Qué hacen los pilotos de combate entre las misiones de combate? Viven una vida normal, se enamoran, esperan las cartas de su casa e incluso forman una orquesta de aficionados. La popular canción Smuglianka (Mujer morena), ahora muy famosa, se pudo escuchar por primera vez en esta película.

27. ‘Iván Vasílievich cambia de profesión’, de Leonid Gaidái (1973)

Nikita Mijalkov/Estudio de cine Dovzhenko, 1973

Un ingeniero crea una máquina del tiempo y accidentalmente teletransporta a Iván el Terrible a la URSS. Al mismo tiempo, un tipo que es clavado al zar y un ladrón que robaba el apartamento de al lado son transferidos accidentalmente a la implacable Edad Media. La comedia se basa en una obra de teatro poco conocida de Mijaíl Bulgákov, Iván Vasilievich, y, al igual que muchas películas cómicas del legendario Gaidái, fue un éxito de taquilla.

26. ‘Oficiales’, de Vladímir Rogovói (1971) 

Vladímir Rogovói/Estudio de cine Gorki, 1971

Esta película sobre la ambición, el deber y el amor cuenta la historia de una familia en la que los hombres de cada generación se ven obligados a luchar en diferentes guerras. La frase “defender la Patria es una profesión”, que aparecía en el film, se ha convertido en un proverbio ruso. En casi todas las familias soviéticas había por lo menos un miembro que sirvió en el Ejército, así que estas no eran palabras vacías para la mayor parte del público.

25. ‘Bienvenido o prohibido el paso a personal no autorizado’, de Elem Klímov (1964)

Elem Klímov/Mosfilm, 1964

¿Has estado alguna vez en un campamento de pioneros? Ve esta película y sentirás que sí. Jugar a las cartas a espaldas de los monitores, amistades reales y bromas muy ingeniosas: ¿qué es lo que no te podría gustar? Y sobre todo, prepárate para el importante programa del día de los padres. Esta comedia familiar de los años 60 todavía hace reír los espectadores modernos.

24. ‘La balada del soldado’, de Grigori Chujrái (1959) 

Grigori Chujrái/Mosfilm, 1959

Después de realizar un acto heroico en el campo de batalla, un joven soldado recibe un permiso para visitar a su madre. El viaje de regreso a casa es largo, y en el camino se encuentra con muchas personas diferentes, incluyendo su primer amor. Se necesita un corazón de piedra para no llorar cuando el soldado abraza a su madre antes de regresar al frente, sin que ninguno de ellos sepa si volverán a verse de nuevo... Otra película intensamente poderosa sobre la Segunda Guerra Mundial.

23. ‘Muchachas’, de Yuri Chuliukin (1961) 

Yuri Chuliukin/Mosfilm, 1961

Una comedia sobre la cocinera Toska, que se enamora de todo un galán que trabaja en una obra de construcción soviética. Ambos son personas orgullosas, así que ninguno quiere ser primero en mostrar sus sentimientos. La glorificación de la clase obrera y el sueño ya desaparecido de un “futuro brillante” no han impedido que la película se convierta en un clásico atemporal. Una ventaja adicional de ver esta película es la posibilidad de conocer muchas recetas a base de patatas.

22. ‘Operación Y y otras aventuras de Shúrik’, de Leonid Gaidái (1965)

Leonid Gaidái/Mosfilm, 1965

El estudiante Shúrik está siempre en apuros. En su primera aventura, tiene que enfrentarse a un matón en una obra de la construcción. En la segunda, al repasar para sus próximos exámenes, acaba tan absorto en su libro de texto que no se da cuenta de todo tipo de peligros. Y en la tercera, sin darse cuenta frena los planes de una banda de ladrones... Shúrik era un héroe popular en la URSS, la imagen del estudiante ejemplar y miembro del Komsomol. Hoy en día, el humor de Gaidái sigue siendo tan agudo como siempre, e incluso los jóvenes rusos pueden citar frases de esta película.

21. ‘La prisionera del Cáucaso, o Nuevas aventuras de Shúrik’, de Leonid Gaidái (1967) 

Leonid Gaidái/Mosfilm, 1967

En esta secuela de Operación Y, Shúrik realiza una expedición al Cáucaso para aprender sobre las costumbres y los brindis locales. Los lugareños se niegan a brindar a menos que Shúrik beba con ellos, y en una ocasión incluso se le ofrece la oportunidad de observar un “robo de novia”. Es otra querida comedia soviética, que dio origen a un meme sobre la mujer soviética modelo, que debería ser “estudiante, miembro del Komsomol, y simplemente hermosa”.

20. ‘Amor y palomas’, de Vladímir Menshov (1984)

Vladímir Menshov/Mosfilm, 1984

¿Sueñas con visitar un pueblo ruso? Entonces esta encantadora comedia rusa es para ti. Un melancólico padre de familia abandona su pueblo natal para ir a un sanatorio, donde conoce a una mujer inteligente que queda encantada por su sencillez provinciana. Pero fuera de las instalaciones, ella comprende que es posible sacar a un hombre de su aldea, pero no la aldea del hombre.

19. ‘El espejo’, de Andréi Tarkovski (1974) 

Andréi Tarkovski/Mosfilm, 1974

Una obra clave en la filmografía del director de culto Tarkovski, El espejo reflexiona sobre la memoria. En la película, su director muestra escenas fragmentarias de su propia infancia: la casa del pueblo, su madre, la madurez o la guerra. La película incluye poemas compuestos y leídos por el rapsoda soviético Arseni Tarkovski, padre del cineasta.

18. ‘Noche de Carnaval’, de Eldar Riazánov (1956) 

Eldar Riazánov/Mosfilm, 1956

Jóvenes trabajadores de una casa de la cultura Soviética ensayan para una presentación de Año Nuevo, pero el director pretende convertir toda la diversión y el baile en un aburrido evento oficial. Hay que detenerlo. La película más taquillera de 1956 fue también el debut cinematográfico del director Eldar Riazánov y de la actriz Liudmila Gúrchenko. También le dio al país eslavo una de sus canciones de Año Nuevo más populares, Cinco minutos. La película siempre se proyectaba en la televisión en Nochevieja, hasta que fue reemplazada por la número 1 de nuestra lista (no miréis abajo todavía).  

17. ‘Diecisiete instantes de una primavera’ (miniserie), de Tatiana Lióznova (1973) 

Tatiana Lióznova/Estudio de cine Gorki, 1973

Un oficial de la inteligencia soviética se infiltra en las más altas esferas de las SS en la Alemania nazi bajo el nombre de Stirlitz. Toda la Unión Soviética contenía el aliento ante el valor y la osadía del personaje principal y derramó lágrimas viendo la escena en la que Stirlitz se encuentra con su esposa después de muchos años de separación, pero ni siquiera puede mirarla para no ser descubierto. Stirlitz (alias “el James Bond ruso”) se convirtió en un héroe nacional, y su nombre está asociado a muchos memes y chistes.

16. ‘Las puertas Pokrovski’, de Mijaíl Kozakov (1983)

Mijaíl Kozakov/Mosfilm, 1983

El alegre Kostia llega a Moscú para estudiar, y se queda en el apartamento comunitario de su tía, impactando en las vidas de sus intelectuales residentes mediante su indiferencia y alegría de vivir... Unas cuantas frases de la película se han convertido en refranes, y esta comedia es una especie de himno a Moscú.

15. ‘Romance de oficina’, de Eldar Riazánov (1977)

Eldar Riazánov/Mosfilm, 1977

Liudmila Prokófievna está tan acostumbrada a dirigir una gran empresa con puño de hierro (y un estilo tan poco imaginativo) que parece haber olvidado que es una mujer joven, atractiva y aún soltera. La intriga comienza cuando uno de sus empleados, que tiene la esperanza de ascender en la escalera profesional, termina enamorándose de su jefa. Esta comedia romántica conquistó la taquilla soviética en su año de estreno, y es una de las películas que más se proyectan hoy en día en la televisión.

14. ‘D'Artagnan y los tres mosqueteros’, de Gueorgui Yúngvald-Jilkévich (1978) 

Gueorgui Yúngvald-Jilkévich/Estudio de cine de Odessa, 1978

No está claro qué es lo que más les gustaba a los niños soviéticos: la novela de Dumas o esta adaptación cinematográfica, que convirtió al actor Mijaíl Boyarski en la eterna imagen de D'Artagnan. La película, que consta de tres partes, cuenta con un maravilloso elenco y melodías que se convirtieron en canciones populares. Por cierto, para que la película pareciera más “francesa”, se rodó en Ucrania, principalmente en Leópolis y Odessa.

13. ‘Quemado por el sol’, de Nikita Mijalkov (1994) 

Habiendo desaparecido después de la guerra civil en Rusia, Mitia aparece repentinamente en la casa de su antigua amada María durante los terribles años de las purgas estalinistas. Ahora está casada con un oficial soviético, y no sabe que su antiguo amor ha venido a destruir el nuevo... Este drama psicológico de múltiples capas es otra de las cintas rusas ganadoras del Óscar. Los acontecimientos se desarrollan al sonido del tango desgarrador Sol cansado.

12. ‘Las doce sillas’, de Leonid Gaidái (1971)

Leonid Gaidái/Mosfilm, 1971

Ostap Bénder, un estafador encantador, busca los diamantes escondidos dentro de un antiguo juego de sillas de la suegra de un conocido. El problema es que las sillas han sido vendidas individualmente y ahora están repartidas por todo el país... Esta adaptación al cine de la novela cómica de los coautores satíricos Iliá Ilf y Evgueni Petrov se convirtió en un clásico del cine gracias, en gran parte, al brillante retrato de Bénder, encarnado por el actor Andréi Mirónov y a las muchas frases memorables que aún hoy son recordadas… y usadas.

11. ‘El brazo de brillantes’, de Leonid Gaidái (1969)

Los contrabandistas colocan por error joyas en el elenco de la persona equivocada, y luego persiguen al desprevenido y respetable hombre de familia. El joven Andréi Mirónov despertó a la fama nacional tras el estreno de esta comedia. La película fue vista por 76,7 millones de personas, un récord en ese entonces.

10. ‘Corazón de perro’, de Vladímir Bortko (1988)

Vladímir Bortko/Lenfilm, 1988

¿Qué sucede si se trasplantan órganos caninos a un ser humano? El profesor soviético Preobrazhenski decide intentarlo. El resultado de este experimento es que el camarada Shárikov parece humano, pero se comporta como un perro. Basada en la popular historia de Mijaíl Bulgákov, su versión cinematográfica es igualmente amada.

9. ‘Estación Bielorrusia’, de Andréi Smirnov (1971)

Andréi Smirnov/Mosfilm, 1971

Camaradas de la Segunda Guerra Mundial regresan del frente a la estación Belorusski de Moscú, y cada uno sigue entonces su propio camino. Se encuentran de nuevo sólo veinticinco años después, en el funeral de un amigo. Esta es una de las películas de guerra más emocionantes, en la que sonó por primera vez la canción de Bulat Okudzhava Necesitamos una victoria para todos, que sigue siendo popular hoy en día.

8. ‘Las aventuras de Sherlock Holmes y el Dr. Watson’ (miniserie), de Ígor Máslenikov (1979-86) 

Ígor Máslenikov/Lenfilm, 1979

La versión soviética de las aventuras del célebre detective creado por Conan Doyle es una de sus mejores adaptaciones, incluso según los críticos británicos. El actor Vasili Livánov recibió la Orden del Imperio Británico por esta interpretación. Una estatua de Holmes y Watson, inspirada en los actores soviéticos, fue instalada en la Embajada Británica en Moscú.

7. ‘Stálker’, de Andréi Tarkovski (1979)

El personaje principal, conocido como Stálker, se gana la vida guiando a gente hacia “la zona”, un área formada después de la caída de un meteorito en la que no se aplican las reglas normales de la realidad. Un día, un profesor y un escritor le piden que los lleve allí. Stálker acepta, pero no tiene ni idea de qué planes están tramando estas personas aparentemente normales... Esta parábola cinematográfica está basada en libro de ciencia ficción Picnic extraterrestre, de los hermanos Strugatski, que también trabajaron en el guion. Es una de las películas más populares de este legendario director.

6. ‘Erizo en la niebla’, de Yuri Norstein (1975)

Esta caricatura filosófica para niños y adultos, sobre un erizo que se pierde en la niebla y cae en un río, pero que es llevado a su destino por la corriente, sigue siendo fascinante hoy en día. En 2003, en Tokio, la obra maestra de Norstein fue reconocida como la mejor película de animación de todos los tiempos.

5. ‘Moscú no cree en las lágrimas’, de Vladímir Menshov (1980)

Vladímir Menshov/Mosfilm, 1980

Una mujer provinciana llega a Moscú, finge ser hija de un profesor y queda embarazada de un moscovita proveniente de una familia intelectual. Habiendo fracasado el matrimonio, se ve obligada a criar sola a su hija, mientras trabaja y estudia al mismo tiempo. Veinte años después, se convierte en directora de una gran empresa... Esta película sobre los sueños hechos realidad obtuvo un Óscar a la mejor película extranjera.

4. ‘Brigada’ (miniserie), de Alexéi Sídorov (2002)

Alexéi Sídorov/Avatar Film, 2002

Cuatro amigos de la infancia que buscaban dinero fácil se involucran en una serie de negocios criminales. Después de esta serie se necesitaron muchos distintos para que el actor principal, Serguéi Bezrúkov, dejara de estar asociado con su personaje del gángster Sasha Beli. Brigada es la respuesta rusa a El Padrino y probablemente la serie más precisa y atmosférica sobre la década de los 90 del pasado siglo.

3. ‘Assa’, de Serguéi Soloviov (1987) 

Global Look Press

Esta película, sobre la relación entre la novia de un capo criminal y un músico que conoce por casualidad, se convirtió en un símbolo de la perestroika de Gorbachov. Esto se debió en gran parte a la banda sonora del film, grabada por varias bandas de rock soviéticas de underground, entre ellas la legendaria Kinó y su icónica canción Peremén (Cambios).

2. ‘Hermano’, de Alexéi Balabánov (1997) 

Danila Bagrov, un tipo común y corriente con fuertes principios, ayuda a su hermano después de que este último se mezclase con gánsteres de la anárquica Rusia de la década de los 90. Al igual que Assa, estrenada diez años antes, esta película fue también banda sonora de su tiempo, con muchas canciones de los mejores grupos de rock de Rusia.

1. ‘La ironía del destino, o goce de su baño’, de Eldar Riazánov (1975)

Eldar Riazánov/Mosfilm, 1975

“Cada año, el 31 de diciembre, mis amigos y yo vamos a los baños”, repite Zhenia, el simpático héroe del cuento, a lo largo de la película. En las mentes rusas, esta frase se asocia para siempre, además de con Año Nuevo, con una situación que podría (o ya lo hizo) salir horriblemente, pero divertidamente mal. La película se ha proyectado cada 31 de diciembre de cada año, sin falta, desde su estreno, manteniendo a un sinnúmero de personas entretenidas mientras cocinan y se preparan para el Año Nuevo. Si alguien se aburre de verlo, no se ha quejado.